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Emprender no es tarea fácil

Causas de FRACASO de los emprendedores

Muchas personas que intentan lanzar un proyecto empresarial fracasan en su propósito. Decir que han fracasado no me gusta mucho, porque realmente el que fracasa es el que quiere y ni siquiera lo intenta.

Hago una lista con los 12 errores más comunes:

- no ser realmente un emprendedor. Si no te sientes agusto tomando decisiones, asumiendo riesgo, etc. seguramente no te vaya muy bien lanzando un proyecto empresarial.

- no ser humilde y aceptar sus debilidades. ¿Te crees que sabes más que los demás y que nadie puede ayudarte? ¿No haces nada para buscar solución a tus debilidades aunque pueden afectar al negocio? Ni lo intentes, solo perderás el tiempo.

- no creer en el proyecto, no estar enamorado. Si tú no crees en el negocio, ¿quién lo va a hacer? Al menor problema o dificultad querrás dejarlo.

- no analizar y definir el proyecto correctamente. Serán tantos los imprevistos que te encuentres sin un análisis del sector, del cliente, una estrategia de lanzamiento adecuada, etc. que te darán palos por todas partes. Dedica tiempo al Business Plan, que para eso está.

- no aportar valor diferencial. Si tu producto/servicio realmente no aporta nada nuevo, ¿por qué van a dirigirse a tí?

- creer que el producto/servicio se venderá solo. Si no das a conocer lo que ofreces y lo pones en el lugar adecuado, en el momento adecuado, no obtendrás ventas y sin ventas no hay empresa. Se suele estimar una inversión en marketing muy inferior a la necesaria.

- asumir un riesgo excesivo. Empezar a lo grande sin controlar ni siquiera lo que tienes más cerca. Empieza a conseguir tus primeros clientes y después vete creciendo y desarrollando el negocio a la par que tu cartera de clientes.

- olvidarse de lo realmente importante. Mucha gente prioriza lo urgente sobre lo importante; gran error. Ten siempre presente lo importante y dale preferencia sobre lo urgente. Si lo que haces no genera valor, que lo hagan otros (delega).

- no rodearte de la gente adecuada. Si no eliges la gente que realmente tenga algo que aportar al negocio, quedarán grandes huecos por los que la competencia te comerá vivo.

- tratar a las personas como máquinas sin sentimientos. Una empresa sin personas no es nada. Para que esta funcione vas a interactuar con muchísimas personas (inversores, clientes, trabajadores, proveedores, la sociedad en general, etc.) que no están dispuestas a ser tratadas inadecuadamente.

- tener una estructura de financiación no adecuada. Si tu estructura financiera no es la adecuada, será cuestión de tiempo que las deudas te coman.

- tener mala suerte. Es imposible tener absolutamente todo bajo control, de ahí el riesgo que se asume. Aun haciéndolo todo bien, puede haber factores que ni imaginamos que nos afecten directamente e inexplicablemente nos dejen fuera del juego.

- etc.

Como ves, hay cantidad de factores que pueden suponer el fin de un proyecto empresarial. Cuanto más claro tengas dónde han fallado otros, más posibilidades tendrás de salir victorioso de la aventura de emprender un negocio.

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